Julio se quedó sin padre hace cinco años, cuando su madre lo mató. Ahora tiene 10 años y vive en Sueros de Cepeda en  León, reside en la casa con su tía , la hermana de su padre, desde el crimen. Y ahora un juez ha decidido que el niño tiene que irse a vivir con sus abuelos maternos, los padres de la asesina. "Queremos que se aplique la coherencia en este caso, que es la felicidad del niño que ha sufrido mucho en esta vida" dice Luis Alfonso Álvarez, alcalde de Villamejil.

Todo el pueblo se ha movilizado, han empapelado la casa donde vive con pancartas. La sentencia es firme y la guardia civil ha intentado cumplir el mandato judicial hasta en tres ocasiones, pero no han podido hacerlo debido a la resistencia del niño. La última vez no se lo pudieron llevar porque el pequeño sufrió una crisis de ansiedad y tuvo que ser trasladado al hospital. "No se merece vover atrás, al sufrimiento por el que ha pasado" afirma el alcalde.

Julio está integrado en su pueblo, va al colegio y aquí está su entorno. La abogada de la familia materna a quien se le ha concedido la custodia del niño, ha solicitado que se abran diligencias contra la tía materna por desobediencia grave a la autoridad judicial.

En estos últimos 5 años el niño no ha tenido a penas contacto con la familia de su madre, Erica, condenada a 18 años de cárcel por el asesinato con alevosía de su exmarido, que tenía la custodia del hijo de ambos. Ella en el juicio lo negó todo: "Me empujó, cuando reaccioné estaba en el suelo, pero no lo pinche".

Según el jurado planeó y organizó el crimen de su expareja para quedarse con el niño. Le esperaron en el portal de su casa y mientras uno de sus complíces le sujetaba, ella le apuñaló hasta en 7 ocasiones. Antes de morir, el hombre le dijo a un testigo que la autora del crimen era su ex esposa. Ahora un juez obliga a este niño a convivir con la familia de la asesina de su padre. En cualquier momento se ejecutará la sentencia.