La joven Laura Luelmo, la profesora asesinada por un hombre en El Campillo (Huelva), no contabilizaría en las actuales estadísticas de víctimas mortales por violencia de género que el Gobierno lleva registrando desde 2003. El hecho de que los asesinatos machistas perpetrados fuera de la pareja no contabilicen como violencia de género conlleva a una revisión de las nuevas estadísticas oficiales para incluir a víctimas como Laura Luelmo o Diana Quer.
Fuentes de la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género han informado que el organismo está recogiendo datos de asesinatos y homicidios de mujeres con el objetivo de realizar una estadística oficial. Esta estará "separada" de la que el Ejecutivo ya realiza desde hace 15 años en la que solo contabiliza a las asesinadas en el ámbito de la pareja.
Tal y como establece el Pacto de Estado contra la Violencia de Género aprobado en 2017, en la nueva estadística se incluirán los asesinatos como el de Laura Luelmo o Diana Quer ya que, según han recalcado estas mismas fuentes, son "violencia contra la mujer" aunque "atienden a otros criterios" que los casos de violencia de género.
Precisamente con motivo de la aprobación del Pacto de Estado, el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) anunció a principios de este año que, en sus balances a partir del 1 de enero de 2018, computará como violencia machista todos aquellos delitos que cometan los hombres contra las mujeres por el mero hecho de ser mujeres, independientemente de si tienen o tuvieron una relación sentimental o no.
Las estadísticas oficiales que el Gobierno elabora actualmente siguen lo establecido en la Ley de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género 1/2004.
Esta norma define la violencia de género como la que perpetra un hombre sobre una mujer con la que ha tenido una relación de pareja o sobre los hijos de ella.
Por el momento, no están incluidos en esta categoría otros tipos de violencia contra las mujeres que sí están reconocidos en el Convenio de Estambul, como los asesinatos perpetrados por desconocidos, como es el caso del de Laura Luelmo o Diana Quer, la joven madrileña asesinada por José Enrique Abuín, alias 'El Chicle', el 22 de agosto de 2016
El Pacto de Estado contra la Violencia de Género contempla un apartado específico sobre seguimiento estadístico. En él figura la obligatoriedad de "obtener y prestar datos estadísticos detallados y secuenciados" sobre todas las formas de violencia contra las mujeres que, de acuerdo con el Convenio de Estambul, se acordó incluir en el Pacto.
Además de los asesinatos de mujeres perpetrados por desconocidos, el Convenio del Consejo de Europa sobre la prevención y lucha contra la violencia contra la Mujer (Convenio de Estambul) reconoce las agresiones sexuales, la trata con fines de esclavitud, el matrimonio forzoso o la mutilación genital femenina como formas de violencia sobre la mujer.
La Delegación del Gobierno para la Violencia de Género está recabando datos sobre asesinatos y homicidios de mujeres con el objetivo de elaborar estadísticas oficiales sobre feminicidios y asesinatos de mujeres en cometidos en España. Sin embargo, de momento sigue ciñéndose a la definición que hace de la violencia de género de la Ley de Violencia de Género de 2004.
Por ello, al haberse producido fuera del ámbito de la pareja, no están incorporados los mediáticos crímenes de Laura Luelmo, Diana Quer, Sonia Carabantes (2003), Rocío Wannikhof (1999), Eva Blanco (1997) entre otros, como el de las tres jóvenes de Alcàsser (1992).
Según el balance oficial del Gobierno, desde el año 2003 han sido asesinadas 975 mujeres a manos de sus parejas o exparejas y 47 en lo que va de 2018, años en el que 39 menores de edad se han quedado huérfanos por este tipo de violencia contra sus madres.
Por su parte, la web 'feminicitio.net' lleva contabilizados 96 feminicidios y asesinatos de mujeres en el 2018. En ellos se incluyen todos los oficiales también registrados en las fichas de la Delegación del Gobierno.
Esta base de datos distingue entre feminicidios 'íntimos oficiales' e 'íntimos no oficiales' para contar los asesinatos en el ámbito de la pareja o expareja; y añade los 'feminicidios no íntimos', entre los que se incluye el de Laura Luelmo Hernández. También distingue entre 'feminicidios familiares', 'infantiles', 'por prostitución', otros feminicidios o asesinatos sin datos suficientes, así como asesinatos de mujeres por robo.
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