Bárbara se ha marchado de la reunión sin dar crédito a lo que acaba de escuchar, que su hijo volviera al día siguiente para hacer las paces. El pasado jueves, su hijo de sólo 7 años acabó en urgencias tras recibir, según denuncia, patadas y puñetazos presuntamente de tres compañeros de colegio de 8, 9 y 10 años que le provocaron "la fisura del labio, los traumatismos y la ayuda psicológica".
Los menores fueron identificados y ya se han reunido con todas las partes en el colegio. Consejería de educación y familiares de agredidos y presuntos agresores, que han tenido un encontronazo a la salida en el que la madre del agredido criticaba al resto por criar "niños asalvajados".
Los familiares de los presuntos agresores hablan de una mera pelea entre niños en el que hubo un golpe en el labio, mientras que desde la Consejería explican lo que ocurrió como "un pequeño conflicto entre dos alumnos que se entendieron y lo arreglaron por sí mismos".
Bárbara, sin embargo, asegura que las lesiones hablan por sí solas, que no era la primera vez y que su hijo lleva sufriendo acoso los dos últimos años, aunque la Consejería se escuda negando que existan denuncias previas por acoso.
Más Noticias
- Encuentran una fosa común con doce fusilados durante la Guerra Civil en Narón (A Coruña)
- Última hora de la DANA | Mazón cesa a Nuria Montes, la consellera criticada por su falta de tacto con las víctimas de la DANA
- Detenido en Barcelona un hombre de 33 años acusado de cometer seis robos con violencia
- Liderazgo frente a las críticas y los bulos: el trabajo de Javier Marcos, jefe de la UME
- Localizado el cuerpo del economista Antonio Noblejas, desaparecido en la DANA, junto al barranco del Poyo
De momento, los presuntos agresores seguirán en el centro hasta que termine la investigación mientras el menor agredido sigue encerrado en casa con miedo a salir a la calle según explican sus padres.
Debido a las condiciones climatológicas
La imagen tres semanas después de la DANA: coches cubiertos de barro y hierba creciendo en ellos
Calles y vehículos siguen atrapados en lodo seco, mientras el tiempo y las condiciones climáticas dan paso a un fenómeno inesperado: vegetación creciendo en los rincones más insólitos.