El rescate a una patera con nueve menores en las costas de Canarias ha dejado dramáticos momentos en el muelle de Arguineguín, Gran Canaria. La embarcación llevaba cinco días a la deriva, y en ella viajaban 52 personas, de las cuales nueve eran menores de edad y se encontraban en muy malas condiciones de salud.
Una de los menores, de tan solo dos años, ha tenido que ser reanimada en el mismo muelle del puerto de Arguineguín. Estaba inconsciente y padecía una hipotermia severa, por lo que precisaba de ayuda urgente. Por suerte, los voluntarios de Cruz Roja pudieron revertir su estado antes de trasladarla al Hospital Materno Infantil.
Aun así, su estado es crítico y permanece ingresada en la UCI. Los otros ocho menores también han sido trasladados al hospital para vigilar su recuperación tras pisar tierra deshidratados y con hipotermia.
La travesía, de cinco días, ha sido especialmente dura para los 52 migrantes subsaharianos, que apenas tenían fuerza para mantenerse en pie. De hecho, algunos tuvieron que ser trasladados en volandas entre varios agentes de la guardia civil para recibir la primera atención médica.
En puerto, los voluntarios de Cruz Roja estaban avisados del estado en el que llegaban los migrantes, especialmente delicado tras cinco días con lo mínimo: sin fuerzas, sin comida y sin agua.
En ella viajaban 29 mujeres, una de ellas embarazada, nueve menores y 14 hombres subsaharianos y, en total, 20 personas tuvieron que ser trasladadas al hospital, de los cuales la mujer embarazada y tres adultos aún continúan ingresados con hipotermia.
Actualmente, Salvamento Marítimo tiene activadas cuatro alertas de pateras desaparecidas en alta mar y están tratando de ser localizadas por un helicóptero; una de ellas preocupa especialmente, ya que los migrantes que la integran podrían llevar varios días en alta mar.
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