El Santa Ana se sumerge cada día más, está tapado por un kilómetro de red, y los buceadores aún no saben si sigue entero o se ha partido en dos. Esta situación sumada a las fuertes mareas está retrasando el acceso al barco.
En palabras de Ramón Artime, alcalde de Gozón, "la actuación puede ser o bien entrar y sacar los cuerpos o bien reflotar el barco".
La opción del remolcar el pesquero sería la elegida si sigue existiendo riesgo para los buceadores. Sin embargo, ellos estarían listos para poder acceder al interior. El jefe del Sevicio Marítimo de la Guardia Civil en Asturias, Emilio González, "los especialistas estuvieron visitando barco prácticamente idénticos para preparar bien al operación".
Mientras tanto, el único superviviente del naufragio ha sido dado de alta. Aunque se encuentra muy mal de animos. Así lo ha confirmado Rosario Piñeiro, portavoz de la empresa armadora.
Hasta Muros, en A Coruña, ha llegado el cuerpo sin vida de una de las dos víctimas encontradas. Sus familiares y amigos siguen sin explicarse lo ocurrido.
De este mismo pueblo son dos de los desaparecidos. Manuel, el mecánico, y Lucas, marinero, que justo había estado en la localidad el día anterior a la tragedia celebrando el tercer cumpleaños de su hijo.
Los otros tripulantes desaparecidos son dos ciudadanos de Indonesia, un portugues y un joven de Asturias, Marcos, que realizaba sus prácticas de técnico de pescca en el Santa Ana.
SÓLO SE HA RESCATADO A UN SUPERVIVIENTE