Sesenta años después de su 'desaparición', la pila bautismal románica de Frumales (Segovia) ha sido encontrada. Se encontraba en el Pazo de Meirás, adonde se la llevó Carmen Polo, la mujer de Franco, después de encapricharse de ella en su paso por la localidad.
Los mayores del pueblo recuerdan perfectamente el día en que Carmen Polo llegó al pueblo, con un séquito de gente, dos camiones militares y un coche, con dos collares blancos al cuello. Ese fue el mismo día en que desapareció la pila.
Durante sesenta años permaneció perdida, pero la salida de los Franco del Pazo y el inventario de sus bienes han hecho que la pila, del primitivo románico segoviano, haya sido localizada.
En ello ha tenido que ver la periodista Sara Cabrero, nacida en Frumales y que ahora trabaja en 'La Voz de Galicia': "Yo llevo conviviendo con la historia de la pila robada o expoliada toda la vida. Recuerdo a mi padre contándomelo desde que era pequeña. Cuando salió el inventario este año, lo primero que hicimos en mi familia fue ir corriendo a ver si la encontrábamos".
Sin embargo, en Frumales dudan que la pila pueda volver a la localidad: "Lo tenemos difícil", lo resume su alcalde, Javier Sanz. ¿La razón? La ausencia de documentación que acredite su propiedad. Sin embargo, en el pueblo están más tranquilos ahora que saben dónde está.
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