Estefanía Muro, bióloga de 'Paleolítico Vivo', ha explicado que en la reserva, ubicada en Salguero de Juarros (Burgos), han intentado "recrear el ecosistema del paleolítico". Para ello, han introducido los uros y las highlands.
Las highlands mantienen las características propias de aquel animal que quedó en aquellas zonas y se ha adaptado al ecosistema en el que ha vivido. Con su pelaje recuerda a las épocas en las que hacía demasiado frío.
Los uros son animales que se extinguen, pero en los años 40 los alemanes decidieron recuperarlos y para ello buscaron aquellos que tenían las características fenotípicas del animal, creando poco a poco una especie que se parece en el pelo y la capa a los uros.
Los caballos de przewalski son los únicos caballos salvajes que quedan en el planeta: jamás se han conseguido domesticar. Cuando los dibujaban en las cuevas hacían una especie de 'M' que marcaba la línea del pelo.
El gran desbrozador del bosque es el bisonte, un animal en peligro de extinción que se come las partes duras de las plantas.