Chicote, nervioso, confiesa que ha repasado muchas veces el guion: "le he contado la historia hasta a mis muñecos". Y es que es normal que se encuentren nerviosos, nada más salir al balcón la gente en la Puerta del Sol ya gritaba.
Sandra, con un atrevido vestido verde asegura que con esos "modelazos" se pasa mucho frío.
El chef y Sabatés comieron allí también, con un menú poco digno de nuestro chef: "Como caldo le pongo un siete, como consomé un cinco". Acompañado Chicote de Sobera, ambos bromean sobre el menú y la mesa de la cena. Sobera comentaba: "¿Has visto como pelo la gamba?".
Así se preparaban para despedir el año, unas campanadas con mucha ilusión: "Me apunto para el año que viene", aseguraba el chef.