El Centro de Primera Acogida de Hortaleza (Madrid) tiene capacidad para acoger a 35 personas. En este momento residen allí 80 y han llegado a albergar hasta 100. Están tan saturados que han tenido que sacar los baños a la calle. Según manifiestan los sindicatos sólo hay 11 inodoros y 14 duchas para los menores acogidos. Además, las habitaciones están repletas de literas donde se producen accidentes como el desprendimiento de los alógenos.

Las aulas de formación, como en otros momentos de saturación, se han llenado también de camas para albergar a más de un centenar de menores este verano. "Hay chicos que duermen en el suelo", revela uno de los migrantes.

Los propios usuarios, la mayoría procedentes de África, han contado a la Sexta que también existen problemas con la comida y con la ropa que reciben, escasa: "Yo una semana con la misma ropa", "Mira, mira... ropa mal", declaran otras personas que se hospedan en el centro.

Una situación que también denuncian las ONG que los atienden. Emilia Lozano, presidenta de Somos Acogida: "Aquí ha habido chicas que no tenían ropa interior, les teníamos que dar ropa interior, pantalones...".

Desde la Comunidad de Madrid se justifican diciendo que todo esto fruto de la crisis migratoria. Y que con la nueva apertura de otro centro en Madrid tratarán de desatascar la situación.