Teresa ya puede saber todo lo que se ha escrito y se ha dicho sobre ella, desde este viernes es consciente de la repercusión de su enfermedad. Cuando su salud empeoró los médicos decidieron quitarle el móvil y ahora que su estado de salud vuelve a ser bueno, ha recuperado la conexión a internet.

Será Teresa la que decida si quiere atender a los medios de comunicación

A pesar de su enfado, Teresa no saldrá del hospital hasta que los análisis de heces, saliva y orina den negativo en ébola.  El hospital Carlos III se plantea dar una rueda de prensa con Teresa y sus médicos el día que reciba el alta.

Antes que ella, su marido, Javier Limón saldrá del hospital. Dispuesto a defender a su mujer, ya se ha reunido con su abogado dentro del Carlos III.Además, Javier Limón podrá recuperar su vida normal, en Alcorcón, como las cinco personas, contactos de riesgo de Teresa que ya han recibido el alta.

Las peluqueras que la atendieron aún no han vuelto a  trabajar, el local seguirá cerrado hasta la semana que viene. Tampoco se han reincorporado la doctora que atendió a Teresa Romero en el centro de Salud, ha cogido unos días de vacaciones. El lunes se reincorpora al mismo centro de Salud la trabajadora de la limpieza que también tuvo contacto con Teresa.