La auxiliar de enfermería está curada del ébola pero sigue en el hospital. “Mientras nuestras investigaciones lleguen a alguna conclusión, se mantienen las medidas de bioseguridad”, afirma Fernando de la Calle, especialista en medicina tropical. En el Carlos III nadie se ha quitado todavía el buzo de protección ya que el ébola ha desaparecido pero en como cualquier otro virus, pueden haber restos en sus fluidos.

Por este motivo, todos los días se recogen muestran y se envían a laboratorios internacionales que cultivan este tipo de microorganismos. “Esto no es como una prueba de un análisis que lo metes en una máquina y te dice el resultado. Esto es un ‘ser vivo’ que hay que esperar que vaya creciendo en las medidas óptimas”, explica Fernando.

Es la primera vez que el virus del ébola llega a un país occidental con medios para saber hasta donde alcanza su malignidad y hay que estudiarlo. El primer enfermo de ébola tratado en EEUU apareció ante los medios de comunicación apenas unas horas después del negativo sin que nadie analizase sus fluidos.

Sin embargo, en España no están dispuestos a arriesgarse. El ébola es un gran desconocido y no quieren más sustos, de manera que Teresa saldrá del hospital cuando todas las preguntas tengan una respuesta científica concreta. Cuando esté totalmente recuperada, podrá comenzar a hacer una vida normal.