La sesión de la Comisión de Fomento del Congreso de los Diputados en la que comparecencen de los presidentes de Adif y Renfe, Gonzalo Ferre y Julio Gómez-Pomar, respectivamente, para informar del accidente de tren registrado el pasado 24 de julio en Santiago de Compostela ha comenzado con un minuto de silencio en recuerdo y homenaje a las víctimas del siniestro.

El presidente del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), Gonzalo Ferre, ha explicado que el tramo de la red ferroviaria Ourense-Santiago de Compostela estaba inicialmente planificado como alta velocidad, pero que posteriormente se modificó a línea convencional. 

Ferre ha indicado durante su comparecencia en la Comisión de Fomento del Congreso de los Diputados que en el proyecto inicial el tramo Ourense-Santiago de Compostela, donde se produjo el accidente ferroviario el pasado 24 de julio, estaba planificado en ancho internacional y con sistema de seguridad ERTMS, capaz de frenar automáticamente el tren si excede la velocidad fijada en ese tramo. 

Sin embargo, durante el desarrollo del proyecto y a propuesta de Adif, este tramo se realizó finalmente en línea convencional y con sistema de seguridad ASFA, que solo frena el tren si circula a más de 200 kilómetros por hora. 

Ferre ha explicado que esta modificación se realizó porque el cambio del ancho de vía europeo a la vía estrecha tanto a la salida de la estación de Santiago de Compostela como en la de Ourense "supondría que apenas habría reducción de tiempos de viaje" con la alta velocidad. 

El presidente de Adif comparece junto al de Renfe, Julio Gómez-Pomar, para explicar sus actuaciones tras el accidente del pasado 24 de julio, que se saldó con 79 víctimas mortales, en una Comisión de Fomento extraordinaria.