Años y años de violaciones a manos de su cuñado y el hermano de este. Es el calvario al que los agresores y la propia hermana de la víctima sometieron a una niña durante siete años en Baleira, Lugo, desde que la menor tenía siete años.
Fue su propia hermana mayor quien instigó y favoreció las agresiones sexuales por parte de su novio y el hermano de este en el domicilio familiar. Agresiones que solo salieron a la luz cuando la pequeña quedó embarazada y tuvo un bebé, al que tuvo que dar en adopción, con tan solo 13 años.
Ahora, los tres acusados han aceptado una pena de tres años de prisión -ellos como autores materiales de las agresiones y la hermana como inductora- tras admitir los hechos ante la Audiencia Provincial de Lugo. La sentencia es fruto de un acuerdo entre la Fiscalía, que inicialmente pedía 11 años de prisión para cada uno de los implicados, la acusación particular y los propios acusados.
Según recoge la agencia Europa Press, el Ministerio Fiscal rebajó su petición de prisión a tres años tras reconocer las atenuantes de dilaciones indebidas y reparación del daño. En concreto, se tuvo en cuenta que la causa llevaba paralizada desde 2016 y que los acusados indemnizaron a la víctima con 50.000 euros.
Consternación e indignación en el pueblo
Tras conocerse la sentencia, el Ayuntamiento de la localidad lucense ha convocado una concentración silenciosa para este sábado, a partir de las 12:00 horas. Por su parte, el alcalde, Ángel Martín, ha asegurado que "nadie del Ayuntamiento sabía nada de lo que estaba pasando" y ha apuntado que Baleira está "en shock" y "consternada" tras conocerse este caso.
"Estamos indignados y apenados por esta atrocidad sucedida en Baleira. Todos los habitantes están consternados desde que conoció la noticia", ha afirmado el primer edil, que ha insistido en que, a pesar de tratarse de una localidad de poco más de 1.000 habitantes, "nunca" hubo "sospechas" de lo que ocurría en esta familia. "Queremos que esto no ocurra nunca más y que se proteja, sobre todo, a los menores", ha remarcado.
A su vez, la plataforma feminista de Lugo ha tachado la condena de "irrisoria" y se ha preguntado "cómo pudo" pasar inadvertido este caso en una localidad de poco más de un millar de habitantes. Su portavoz, Ana Torrón, se preguntaba "cómo ha podido pasar esto durante siete años y que nadie se enterara". A su juicio, ha fallado "el círculo" personal de la niña, "el resto" de la familia y el colegio: "Todo falla si nadie es capaz de detectar lo que se le está haciendo a una niña de siete años que a los 13 se quedó embarazada", aseveró.
Asimismo, ha criticado la decisión de ofrecer a los agresores "un acuerdo por una cantidad de dinero que es irrisoria en comparación a todo el daño irreversible que le han producido a esta mujer". "El dinero que le han dado no le va a llegar para pagar todos los psicólogos que le van a hacer falta para superar semejante barbaridad realizada por unos desgraciados", agregó, apuntando que casos como este o el asesinato de Cristina Cabo a finales del pasado año en Lugo revelan que "sale muy barato" hacer daño a las mujeres.