Víctor estaba a punto de llegar a su trabajo cuando se encontró de frente con un coche que circulaba en sentido contrario. Tenía sólo 20 años. Su coche, un Citröen c4 quedó irreconocible después de que un vehículo conducido por un hombre de 35 años que triplicaba la tasa de alcoholemia chocara contra él, según ha publicado El País.
Un asesino, para una de las testigos, que se cruzó con él en la carretera pocos minutos antes del accidente. Jose, la tía de Víctor, pudo hablar con ella y ahora solo pide que "esto no quede así".
La mujer, que iba a una competición, avisó a otras madres de que tuvieran cuidado porque "iba como loco". Un dato clave para la investigación, ya que si se demostrara que se equivocó, le imputarían un delito de homicidio imprudente, con penas de 1 a 4 años de cárcel.
Si conscientemente tomó el sentido contrario podrían acusarle de un delito de homicidio imprudente y otro de conducción temeraria. Castigados con hasta nueve años de cárcel.
La vida de Víctor se truncó en el kilómetro 25 de la M.50. Tenía novia, estudiaba un grado en Animación Deportiva, tenía planes y tenía además una familia rota por la muerte de su hermano mayor hace sólo 11 meses. Ahora empezaban a levantar cabeza: "Quería estudiar, sacarse sus oposiciones", ha relatado la tía de la víctima.
El joven ya ha sido velado e incinerado, mientras que el Kamikaze resultó herido leve y sigue en el hospital, por lo que aún no ha declarado ante el juez.
No hay heridos
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Los detalles El fuego se originó en la tercera planta del edificio alrededor de las cinco de la mañana de este sábado y se propagó rápidamente debido a que la estructura es de madera. Los bomberos ya han extinguido el incendio.