Un trabajador muerto y tres heridos, dos de ellos de gravedad, es el balance del accidente que se ha registrado en la localidad navarra de Urdax al derrumbarse una edificio en obras. Fuentes de la Guardia Civil, que se ha hecho cargo de la investigación del suceso, han precisado que en un primer momento se dio por desaparecido a uno de los operarios, cuyo cuerpo sin vida ha sido localizado posteriormente.
El suceso se ha registrado sobre la una del mediodía cuando se ha venido abajo parte del tejado del edificio en construcción, ubicado muy cerca de la frontera con Francia, lo que ha propiciado el hundimiento parcial del inmueble.
El trabajador fallecido es J.M.P.G., de 47 años y residente en Irún. El cadáver ha sido trasladado al Instituto Navarro de Medicina Legal de Pamplona para practicar la autopsia.
De entre los heridos, uno de ellos, de 25 años y vecino de Oiz, en Navarra, se encuentra en "riesgo vital". El tercer herido grave, nacido en Galicia, tiene varias extremidades rotas, mientras que un cuarto ha resultado con heridas de carácter leve.
Diversas fuentes consultadas han informado de que el suceso se ha producido cuando los trabajadores de la constructora, la guipuzcoana Erreti, estaban trabajando en la cobertura de aguas del edificio, que consta de un semisótano y cuatro plantas y que estaba previsto que se destinara a una venta.
El alcalde de Urdax, Santiago Villares, ha explicado que los trabajadores estaban echando el cemento del forjado del tejado cuando una de las chapas ha cedido y ha tirado abajo el resto del encofrado, lo que ha ocasionado el derrumbe parcial del inmueble.
La obra la promovía la empresa Bostargi, S.L., que ya dispone de otra venta en la zona, el barrio de Dantxarinea de Urdax, donde se ubica la frontera con Francia.
Villares ha indicado, además, que la obra pasó esta semana una inspección por parte de técnicos en seguridad laboral, "que felicitaron" a los promotores por cómo se estaba ejecutando el proyecto.
El Ayuntamiento de Urdax ha convocado para esta noche un pleno extraordinario. Tras el accidente, el sindicato CCOO ha denunciado la "lamentable situación" de la siniestralidad laboral, que atribuye a las consecuencias de los recortes y la crisis económica que inciden en la disminución de la seguridad de los trabajadores.