Por esta zona lo han intentado alrededor de 100 personas, de las que alrededor de 40 han conseguido superar el triple obstáculo que compone el vallado, en el que unos 17 subsaharianos han quedado encaramados en la verja más próxima a Melilla. No obstante, a lo largo de toda la madrugada se han producido varios avistamientos de grupos numerosos que sumaban algo más de 400 personas, según fuentes policiales.
Tras conseguir saltar la valla, los subsaharianos se han dirigido hasta el CETI, en esta ocasión acompañados en parte de su recorrido por una patrulla de la Policía Nacional. Al llegar al centro, han sido recibidos por algunos de sus compañeros con el tradicional grito de victoria del 'Bosa, Bosa'. Varios de los recién llegados presentaban algunas heridas, por lo que, al menos tres, han tenido que ser trasladados hasta el Hospital Comarcal para recibir asistencia sanitaria.
La carretera de circunvalación, que discurre paralela al perímetro fronterizo, se encuentra cortada al tráfico en el tramo que va desde el aeropuerto, mientras que el puesto fronterizo del Barrio Chino también está cerrado. En la zona, hay un importante despliegue de agentes de la Guardia Civil, que está intentado convencer a los inmigrantes de que se bajen de la valla, donde llevan subidos casi tres horas.
La de hoy es la tercera entrada de inmigrantes subsaharianos de 2015 a través de la valla, si bien la presión migratoria es continua, con acercamientos e intentos que se producen casi a diario. Esta nueva intentona de salto se produce un día después de que Marruecos anunciase que se dispone a desmantelar los campamentos próximos a Ceuta y Melilla, en los que los inmigrantes subsaharianos esperan para acceder a España.

A 150 kilómetros por hora
13 de años de prisión para el kamikaze que mató a una menor circulando en sentido contrario
Seis minutos de horror El kamikaze iba al volante de un coche, drogado y borracho, conduciendo a 150 kilómetros por hora en sentido contrario durante 12 kilómetros por una carretera de Barcelona. Impactó contra otro coche en el que iba Meritxell con su padre, su prima y una amiga. La joven de 17 años murió.