En un furgón perdía la libertad una vez más el violador del estilete. El sábado salió de los juzgados rumbo a la cárcel de Bonxe en la provincia de Lugo. El juez lo ha condenado por un delito de agresión sexual en grado de tentativa pero él, recurrirá, dice que tiene coartada: "Tiene justificantes de haber llegado a Lugo a una hora, de haber salido de Lugo a otra hora y los hechos que se le imputan son posteriores a su salida de Lugo" cuenta su abogado, Marco Candal.
Después de 32 años en prisión por violar a 56 mujeres, Félix Vidal salía de prisión a finales de diciembre por la derogación de la Doctrina Parot. Pero tan sólo 105 días después, la Policía lo detenía en casa de sus padres. Fue identificado por su víctima a la que el miércoles siguió hasta el portal y ya en el rellano de su casa, se abalanzó sobre ella, le tapó la boca y la amenazó.
Un comportamiento, el reincidente, que preveían los expertos. Tras su envío a prisión, los vecinos están más tranquilos. Al violador del estilete le podrían caer entre uno y cinco años de cárcel o hasta seis si se tiene en cuenta la reincidencia como agravante.