La conmovedora escena en la que una leona, afligida por la pérdida reciente de sus cachorros, se entrega al cuidado de una cría de antílope fue capturada por Gordon Donovan, fotógrafo neoyorquino, en el Parque Nacional de Etosha, en Namibia.
Los cachorros de la leona fueron asesinados cuando un nuevo macho dominante se unió a la manada. Sin embargo, sus instintos maternales se mantuvieron intactos y la llevaron a centrar toda sus atenciones en una cría de antílope. La leona incluso, protegió a su joven pupilo de un par de leonas embarazadas que se acercaron a buscar comida
Se desconoce cómo pudo llegar la cría de antílope hasta dar con la leona. Aunque lo más probable es que los dos no se hayan tropezado por casualidad, teniendo en cuenta que las gacelas y los antílopes son el plato favorito de los leones. Al fin y al cabo, es más común de lo que parece que las leonas jueguen con sus presas antes de convertirlas en su comida, por lo que el final de esta historia quizá sea más amargo de lo que la escena que conmovió y sorprendió al fotógrafo nos transmita.