Carmelo Encinas sostiene que la nueva Ley de Seguridad Ciudadana demuestra que "el Gobierno está obsesionado con la gente de la calle". Encinas ha recordado las palabras de Fraga: "la calle es mía" para afirmar que el Gobierno actual se cree ahora dueño de la calle. "Con esta nueva Ley prácticamente no se podrá andar por la calle".

No obstante, Encinas reconoce que la ley recoge algunos aspectos que no considera negativos. "La nueva Ley está presidida por la obsesión por las protestas callejeras. No se puede multar con 30.000 euros las discrepancias o insultos con un policía, porque la versión del agente siempre prevalecerá por encima de la persona".

Pilar Gómez insiste en que las multas se producen si haces una manifestación o protesta sin permiso. "Los señores del 15M que pidieron permiso y marcharon de forma pacífica no tendrá ningún problema. Hay que dejar claro que las multas van dirigidas a las protestas sin permiso".

Por su parte, Angélica Rubio cree que esta ley demuestra una actitud a la defensiva del Gobierno. "Si las cosas van a mejorar el próximo año, disminuirán las protestas sociales. No se entiende, por tanto, esta represiva ley. Están metiendo miedo a la gente para que no salgan a la calle".