Una investigación interna determinará qué falló en la tragedia de Barbate en la que murieron dos guardias civiles arrollados por una narcolancha, después de que los agentes de la Guardia Civil hayan apuntado al capitán.
José Antonio Belizón, delegado en Cádiz de la Asociación Española de Guardias Civiles, ha indicado en Al Rojo Vivo que están completamente "indignados" por lo sucedido, asegurando que era algo que se podría "haber evitado".
Este agente ha explicado que el error fue no tomar la determinación de abortar esa operación. "Si no se puede ejecutar, el mando que está a pie de la operación puede abortar", ha indicado, destacando que no se cumplían las condiciones adecuadas para llevarla a cabo.
Además, ha desvelado que "no había riesgo para ninguna persona y no llevaban droga encima", por lo que era posible abortar la operación. El guardia civil ha destacado que, en ese caso, se estaba cometiendo el delito de pilotar una embarcación prohibida.