Pedro Sánchez cree que celebrar un referéndum en Cataluña es "hablar de un absurdo"

Pedro Sánchez ha asegurado que si los independentistas insisten nuevamente en saltarse el marco constitucional para proclamar la republica catalana "se volverá a aplicar la ley". Así se ha expresado el presidente del Gobierno en una entrevista concedida a Al Rojo Vivo, la primera que ofrece tras la concesión de los indultos a los presos del procés. En el programa ha aseverado una vez más que el PSOE "absolutamente" nunca apoyará la celebración de un referéndum de autodeterminación: "Estamos hablando de un absurdo".

Sánchez ha recordado que "la democracia no persigue a nadie por defender sus ideales dentro de la legalidad democrática", y ha querido matizar que "una cosa son las palabras y otras los hechos", en referencia a los últimos movimientos efectuados desde Cataluña en relación a esta cuestión: "Desde que soy presidente del Gobierno, no he escuchado a ningún líder independentista, al menos quienes ostentan ahora mismo cargos en el Govern de la Generalitat, hablar ni de vía unilateral ni un quebrantamiento de la legalidad democrática".

En contraposición, ha lamentado que, en muchas ocasiones, los independentistas hablen "de la supuesta mala calidad de la democracia española, diciendo que nuestra Constitución y democracia no reconocen la capacidad de ejercer el derecho a la autodeterminación". Y ha ahondado en esta cuestión: "Si llevamos al absurdo ese razonamiento, tampoco la constitución alemana, la francesa, la italiana o la estadounidense lo permiten. Significaría decir que ninguna de estas democracias son de alta calidad para los independentistas".

"Aragonés sin duda sabe esto", ha subrayado el líder del Ejecutivo, quien también ha razonado que "desde el punto de vista matemático" también "es imposible" la concesión de la celebración de un referéndum en Cataluña sin saltarse el marco legal. Tal y como expresó este miércoles en el Congreso de los Diputados, habría que "modificar el Artículo 2 de la Constitución, y eso exige una mayoría reforzada de dos tercios". Por tanto, según ha añadido, "no solo se necesitaría del concurso del PSOE, también del PP".

Un referéndum nos uniría a todos un día para votar, pero al día siguiente la sociedad catalana vería agravada aún más su fractura"

Sánchez ha sentenciado así que se está "hablando de un absurdo" y ha querido reivindicar el papel de su Gobierno en busca de la convivencia: "Todas las medidas que he puesto en marcha desde que soy presidente han ido dirigidas a garantizar y reconstruir la convivencia rota como consecuencia, primordialmente, de los independentistas en 2017". en este punto, ha precisado: "Creo, por convicción y por una visión clara de lo que necesitan Cataluña y España, que un referéndum nos uniría a todos un día para votar, pero al día siguiente la sociedad catalana vería agravada aún más su fraccionamiento y fractura".

Así las cosas, para Sánchez el dilema está muy claro en este escenario: "Si vivimos juntos, decidimos juntos". "¿Que hay un problema? Es evidente", ha admitido, poniendo en valor que su Gobierno, con la aplicación de las medidas de gracia para los presos del procés, ha querido "iniciar un camino de reparación, superación y de mirar hacia delante, y dejar atrás un mal pasado del que nadie se puede sentir orgulloso, ni siquiera los independentistas". Fue eso lo que le trasladó al president de la Generalitat en último encuentro que mantuvieron ambos a razón de la resolución de este conflicto.

Un escenario "totalmente" distinto

"Le dije que ahora Cataluña tiene que hablar con Cataluña". Actuar de un modo contrario, según ha criticado, es "invisibilizar a una parte no menor" de la comunidad "que no está de acuerdo con esta hoja de ruta". ¿Dónde se establece entonces ese punto de encuentro entre ambas posiciones? He ahí la clave de esta situación para Sánchez, encontarlo: "Por eso era necesario, en primer lugar, restaurar la convivencia y propiciar una de las demandas fundamentales de la sociedad catalana, se vote lo que se vote, que era la medida de gracia. Creíamos que era necesario, entre todos, iniciar ese camino de reparación".

Pero ¿por qué ahora sí y antes no? El presidente ha argumentado que el contexto en ambos escenarios era totalmente distinto, advirtiendo de que hace unos años se vio una Cataluña "incendiada", y que hoy, en cambio, existe una coyuntura "completamente distinta". "Hubo un tiempo en el que lo necesario era defender la sentencia del Tribunal Supremo, pero ahora estamos en un momento completamente distinto". Así, entiende que "la sociedad catalana ha pedido al conjunto de España un ejercicio de comprensión y magnanimidad para superar esta crisis de 2017".

En línea con esta reflexión, el dirigente socialista ha rechazado que hubiese acusado de "revanchistas" a quienes se mostraron contrarios a los indultos y que han mantenido esa misma opinión tras la puesta en libertad de los condenados por el procés: "Lo decía más por el Partido Popular y por Vox". Justamente, se ha mostrado muy crítico en relación a la postura de la derecha sobre el modo de proceder del Gobierno en este aspecto.

"En muchas ocasiones, cuando veo a esta oposición tan furibunda, me refiero a la ausencia total de proyecto político para España -porque no lo tienen para Cataluña- del principal partido de la oposición", ha zanjado sobre los populares, a quienes también ha llamado la atención a colación de la polémica relativa al Tribunal de Cuentas: "Bloquear su renovación, y que ahora sea una exministra de Aznar la que está elaborando los expedientes vinculados con los políticos independentistas, no deja de ser también un anacronismo que el PP debería mirarse".

Así se ha referido a la actuación del organismo administrativo que reclama 5,4 millones de euros a 39 ex altos cargos del Govern -entre ellos Oriol Junqueras, Artur Mas y Carles Puigdemont- por los supuestos gastos indebidos realizados en la promoción del procés en el exterior. Al mismo tiempo, ha señalado que el indulto "no les ha salido gratis" a los dirigentes penados por la Justicia. Además de haber estado "44 meses en prisión", ha incidido en que "no se han revisado procesos y periodos de inhabilitación" política y sí se ha impuesto una "condicionalidad a que este indulto se levante".

El presidente del Gobierno ha ido cambiando sus posiciones con el tiempo"

Con estas palabras ha respondido Sánchez a lo expresado horas antes por Pere Aragonès, que puso en duda el rechazo de Sánchez a la celebración del referéndum. El president de la Generalitat manifestó, también en una entrevista concedida a Al Rojo Vivo, que el líder del Ejecutivo "ha tenido posiciones con anterioridad que, con el tiempo, se han ido moviendo", si bien aseguró que el sector independentista no renunciaría a su proyecto de hacer de Cataluña un nuevo país.

"Nosotros no nos vamos a rendir ni a renunciar a nuestros objetivos, a lo que decida la ciudadanía catalana en las urnas", anunció Aragonès, que a lo largo de su intervención planteó la posibilidad de llevar a cabouna consulta vinculante a través de otras vías. "Siete años atrás, en el Congreso se planteó un debate para transferir a la Generalitat de Cataluña las competencias para la convocatoria de un referéndum", recordó en laSexta. Allí mismo llamó "a tener una mentalidad abierta" si, bajo su criterio, se desea "empezar a poner los cimientos para la resolución de este conflicto".