"Tenía que venirme aquí o me iba a la calle". Así resume Mar García su traslado forzoso al nuevo hospital de pandemias Isabel Zendal, el proyecto estrella de la gestión del coronavirus de Isabel Díaz Ayuso.
Esta celadora explica que tenía contrato hasta el 31 de diciembre en el Hospital 12 de Octubre, pero se ha visto obligada a dejar su puesto allí para trabajar en el nuevo centro de emergencias.
Como ella, cientos de sanitarios madrileños están siendo objeto de traslados a la fuerza desde otros hospitales públicos de la región para dotar de personal al Zendal, ya que la Comunidad solo pudo reclutar a un centenar de voluntarios y necesita 669 trabajadores para poner en marcha las primeras 240 camas.
"Yo me puedo negar, pero me echan, no trabajo y luego te sancionan por rechazar un contrato", asegura Mar a laSexta, ante el nuevo hospital en Valdebebeas que, según apunta, ni siquiera está terminado, 10 días después de su inauguración.
"El problema es que esto no está todavía terminado, hay muchas obras, nada más que está la parte de hospitalización", indica, señalando que los empleados allí ni siquiera disponen de "una cafetería ni una máquina de café".
Su situación, lamenta, es de incertidumbre. "No sabemos si nos van a asegurar el turno; yo estoy de mañanas, nos van a meter una semana de noches...", relata. Ello, el mismo día en que el hospital recibe a sus primeros pacientes, mientras continúan las protestas por los traslados de personal.