El diario ABC publica unas fotografías del juez Castro, encargado de instruir el caso Nóos, y una de las abogadas de la acusación, Virginia López Negrete, tomándose un gin-tonic en una terraza. Las imágenes ya han generado polémica, y son muchos los que se preguntan si esa es la actitud correcta.

Virginia López Negrete ha afirmado en 'Al Rojo Vivo' que se trató de un encuentro totalmente improvisado. "Estaba pasando el fin de semana en Palma de Mallorca con mi pareja y unos amigos. El domingo tras la comida, y antes de coger el taxi camino al aeropuerto, me encontré con el juez Castro, que al parecer vive por la zona", ha explicado la letrada de Manos Limpias.

López Negrete asegura que fue un encuentro casual y "típico entre dos personas que se conocen y se encuentran". La abogada relata que sus acompañantes cogieron el taxi, y que ella se quedó con el juez "escasos 20 minutos" tomando un refresco. La conversación fue "totalmente normal", según la abogada.