La Real Federación Española de Fútbol ha devuelto el órdago a las campeonas del mundo. La nueva entrenadora nacional, Montse Tomé, ha convocado a las jugadoras que se oponen a acudir a la convocatoria de la Selección Española y si se oponen a hacerlo podrían enfrentarse a la amenaza de duras sanciones.
Tras ser convocadas, 15 de ellas difundieron un comunicado insistiendo en su negativa a vestir la camiseta de La Roja. En teoría, estaban citadas por la nueva seleccionadora en Las Rozas a las 11:00 horas, después de que Tomé asegurara que había hablado con las jugadoras y estaban dispuestas a ser convocadas.
Una realidad que desmienten las jugadoras, que han vuelto a plantarse ante la RFEF reiterando su negativa a acudir a la convocatoria. Sin embargo, esta decisión las enfrenta a sanciones que podrían acabar con su trayectoria deportiva, ya que podrían ser inhabilitadas incluso para jugar con sus propios clubes.
Un hecho que ha valorado Antonio García Ferreras en Al Rojo Vivo como "el órdago de los herederos de Rubiales a las campeonas del mundo": "Ellas querrían vestir La Roja, pero no en estas condiciones. Algunas tienen hasta miedo. La situación es impresentable en la Federación. El desastre, la provocación de los actuales responsables de la Federación continúa, actúan como señoritos en un cortijo; la ley solo la imponen ellos".
El director de Al Rojo Vivo ha asegurado que Tomé "anunció el equipo mintiendo una y otra vez". "¿Esta es la que va a dirigir al equipo en los partidos trascendentales para los Juegos Olímpicos?", se ha preguntado Ferreras, que ha asegurado que es "una vergüenza que los herederos de Rubiales sigan al frente y que la seleccionadora sea una mentirosa en la convocatoria".
El Gobierno de España ya ha comenzado conversaciones con las jugadoras tras manifestar su indignación con lo sucedido. "Es la vergüenza de la Federación, que se está cargando el fútbol femenino en España tan solo un mes después de ganar el Campeonato del Mundo", ha zanjado el presentador.