Los reventones se forman dentro de las nubes tipo cúmulo. En general, dentro de las nubes de tormenta o Cumulonimbos, suelen darse dos tipos, reventones húmedos o secos depende de si la precipitación o lluvia llega al suelo.
Los reventones son fuertes corrientes descendentes de aire que salen de las nubes de tormenta. Es como si pinchas un globo dentro de la nube que está llena de agua y toda esa agua cae de golpe con un gran chorro de viento vertical.
Al llegar al suelo, esa corriente descendente de aire se desplaza en todas direcciones, generando vientos que pueden superar los 85 km/h, y hay registros de hasta 130 km/h (se consideran huracanadas cuando superan los 120 km/h). Si es un reventón húmedo, la lluvia acompaña a esta explosión de viento, por lo que la meteorología en el suelo es muy adversa, rachas de viento muy fuertes, lluvia racheada, todo se vuela, de ahí que a veces se confunde con un tornado.
Si es un reventón seco, sólo se nota el viento al llegar al suelo, pero además pueden subir las temperaturas por encima de los 30 ºC o incluso hasta los 40 ºC, junto con rachas de viento muy fuertes que provocan destrozos también. La lluvia en este caso se evapora antes de llegar al suelo, porque se encuentra con una capa de aire seco y cálido que la evapora. Son más habituales por la mañana o por la noche. Hay registros en el mundo de reventones cálidos en donde la temperatura subió por encima de los 65 ºC, como en Turquía.
Duran entre 5 y 30 minutos y pueden afectar a un radio de 10 km. Si el radio de acción es de 4 km o menos se consideran microreventones. Suelen tirar árboles, mobiliario urbano, dejar heridos o incluso fallecidos, como ocurrió en el Festival Medusa de Cullera (Valencia) de 2022.