Segunda jornada de huelga indefinida de recogida de basura y jardinería en Madrid. La ciudad empieza a acumular basura en sus calles. Los trabajadores se han reunido con la empresa, pero no han llegado a ningún acuerdo de momento.

La empresa ha puesto sobre la mesa rebajar en 200 el número de despidos, pero todavía serían 900 los empleados que se quedarían en el paro. Una oferta insuficiente por la que los trabajadores han roto las negociaciones.

Ana Botella, alcaldesa de Madrid, culpa a los sindicatos de cometer actos de vandalismo. Botella les pide que paren lo que considera acciones violentas. El Ayuntamiento de Madrid se lava las manos afirmando que, tras externalizar el servicio, el problema es entre la empresa y sus empleados.