Los estudiantes han salido a la calle para protestar contra los recortes en educación y pedir la dimisión del ministro de Educación. La segunda jornada de huelga ha sido seguida en más de 70 ciudades del país. Unas protestas en las que los alumnos no están solos, sus padres los apoyan. El Sindicato de Estudiantes cifra en un 85% el seguimiento y en 40.000 los asistentes a las protestas en Madrid.

Para el periodista Carlos Santos es bastante razonable que este sector se manifieste. "El sector estudiantil es el más sensible y el que realmente está sufriendo el desempleo". Para Ramón Pérez Maura lo preocupante "es que siga existiendo una clase educativa que se niega a esforzarse para labrarse un futuro. Y encima apoyados por sus padres". Ante esta afirmación, Antonio Pérez-Henares ha puntualizado que "los padres que se están uniendo a estas protestas están cometiendo una auténtica memez". Antonio Miguel Carmona y el propio García Ferreras no han tardado en rebatirle su argumento.