Partimos de Suiza, allí, en las cuentas que los dos amigos tenían abiertas en el UBS llegaba el dinero de las comisiones por adjudicaciones a empresarios. La manera que encontraba Marjaliza de sacar el dinero de allí es en forma de obras de arte. Obras de arte que no existían pero que, se simulaba, alguien compraba en Costa Rica. De esta manera, el dinero sale de Suiza para ir a América, camuflado.

De allí estas obras de arte ficticias viajan de nuevo, lo hacen al sudeste asiático: Singapur. Allí los investigadores estiman que llevaron a moverse más de 5 millones de euros.  Dinero que, ahora sí, llegaría a España, ya limpio.

'El País' asegura que Granados y Marjaliza, al menos habrían podido retornar cuatro millones de euros desde Singapur con este sistema. Las operaciones, según 'El País', las hacía Marjaliza, pero manteniendo al tanto a Francisco Granados.

Ese dinero que procedía de mordidas por adjudicaciones millonarias. VozPopuli habla de casi 170 millones de euros que se movían en pelotazos municipales, solamente en el tiempo en que estaban siendo investigados por la UCO.

Contratos millonarios con la empresa COFELY, por ejemplo en Móstoles. 72 millones de euros de contrato por los que la mordida correspondiente llegaría casi al cuarto de millón de euros. En Parla, o en Collado Villalba, donde los 40 millones de euros de contrato con Cofely arrancaron presuntametne mordidas de 70.000 euros para cada uno de los beneficiados.