No solo no convence sino que está recibiendo críticas por todas partes. Se cuestiona la utilidad de ese buzón de denuncia contra el fraude. Desde el propio ministerio de Empleo, se alerta de que no hay personal específico que se encargue de gestionar los formularios que se reciban y que ni siquiera existiría un protocolo para saber qué hacer una vez que lleguen.

Muy duros están siendo los sindicatos con el buzón. Definen este sistema de denuncia como "peligroso" y como "chivatazos anónimos propios de países totalitarios".

Que se pueda hacer de forma anónima, algo que se salta de lleno la ley, también es criticado. Desde Inspección de trabajo alertan: así será imposible confirmar las denuncias o investigar abusos por ejemplo. Pero ya hay quien le ha sacado provecho. Y precisamente es el Partido Popular quien recibe muchas de esas denuncias. Por ejemplo: Le acusan de permitir que grandes defraudadores de fortunas alojadas en paraisos fiscales, regularicen su situación con la Amnistía Fiscal. Y varias referencias también a esa indemnización en diferido explicada por Cospedal. Aparecen además denuncias contra el cobro de sobresueldos, el reparto de dinero en sobres. Parece que muchos han encontrado la oportunidad de expresar sus quejas, pero de nuestros políticos.