Javier Vega, entrenador de baloncesto del Club Deportivo Alcalá entre 1998 y 2006, cuenta a Mamen Mendizábal la respuesta que tuvo desde la Federación de Deportes con Discapacidad Intelectual (FEDI) cuando le dice que en la Selección paralímpica hay jugadores sin discapacidad.
"Eduardo García, que es el director técnico o secretario, dice que lo hacen todos los equipos del mundo porque lo que interesa es ganar medallas porque las medallas dan dinero", destaca Javier Vega. Y es que no solo es que hubiera hasta 10 jugadores sin discapacidad, es que uno de ellos, era menor.
Más Noticias
-
Un investigador analiza el entramado empresarial de Daniel Cabrera: "Eran escudo e instrumento para cometer el presunto delito"
-
El divertido comentario de Cristina Pardo sobre el look de Jordi Évole: "Cada viernes nos trae un modelo distinto de chándal"
-
El 'dardo' de Iñaki López a Jordi Évole debido a la falta de luz en su conexión: "Puedes acabar entrevistando a un seto"
-
'Equipo de Investigación' localiza a la tía del estafador Daniel Cabrera: "Es un niño con corazón de oro, pero la vida..."
-
David Bustamante, Santi Rodríguez, Blas Cantó... el reguero de eventos cancelados por la empresa de Daniel Cabrera
Se trata de Adolfo Poveda, cuyos padres mandaron una carta a Javier Vega diciendo que Eduardo García fue el que le intentó convencer de que asumiera que tenía una discapacidad. "Adolfo no ha pasado reconocimiento médico alguno, ni físico ni psíquico", escribieron los padres.

Un mal susto
Ramoncín fue acusado de sustraer 57.000 euros en facturas falsas de la SGAE: "Me pidieron cuatro años y medio de cárcel"
"La SGAE decía que no le había quitado dinero", recuerda Ramoncín, quien tenía miedo porque pensaba: "¿Y si me condenan? ¿Y si el Tribunal no entiende o yo me expreso mal o los abogados lo hacen mal?". Estaba en juego una condena de cuatro años y medio.