Steve Aoki, un DJ de fama mundial conocido por pinchar música electrónica, era la estrella de la macrofiesta organizada en el Madrid Arena en la fatídica noche en la que murieron cinco chicas aplastadas tras una avalancha. Uno de los abogados de las víctimas del Madrid Arena explica en este vídeo cuál fue el momento crítico de la noche que terminó con una avalancha mortal en la que murieron cinco chicas tras superarse un 215% del aforo.
A las 03:00 horas ya hay un problema muy serio con el aforo "porque en esos momentos la autorización, que era de 7.000 personas, lo que hace es triplicarse, porque hay 22.000 personas", explica José Luis, experto en seguridad y analista de riesgos, que asegura que "de acuerdo con la aplicación de la normativa, en donde debiera haber un máximo de cuatro personas por metro cuadrado, lo que hay son 12 personas por metro cuadrado".
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Steve Aoki, incluso, se enorgullecía de la cantidad de gente que había en el recinto: "¿Os podéis creer que aquí y ahora seamos 15.000 putas personas?". "¿Estáis putos preparados, España?", preguntaba el DJ sin saber que, 35 minutos después de produciría la dramática avalancha que acabó con la vida de cinco jóvenes. "Cuando ves que no puedes andar por ti sola, pues te asustas y el hecho de que ya tú no respondas de tus propios pasos, sino que es la gente la que te mueve...", recuerda María, que explica que ella iba de la mano de una amiga, pero entre la multitud se separaron: "Yo miraba para atrás y ella me llamaba y claro, yo no podía hacer nada". "Cuando te ves atrapada y tú ves que no puedes hacer nada y que no dependes de ti es una sensación de desesperación, de querer andar y no poder", relata la joven.
Un mal susto
Ramoncín fue acusado de sustraer 57.000 euros en facturas falsas de la SGAE: "Me pidieron cuatro años y medio de cárcel"
"La SGAE decía que no le había quitado dinero", recuerda Ramoncín, quien tenía miedo porque pensaba: "¿Y si me condenan? ¿Y si el Tribunal no entiende o yo me expreso mal o los abogados lo hacen mal?". Estaba en juego una condena de cuatro años y medio.