Jalis de la Serna habla con un hostelero de Benidorm sobre los 'mojiteros' que recorren la playa de una punta a otra, con una bandeja llena de cócteles a 10 euros el vaso. Los falsos camareros llevan una media de ocho vasos por bandeja, lo que supone 80 euros. Una actividad que se repite cada verano en este destino turístico y que dice el hostelero ser "completamente ilegal". "Mojito, mojito", estas son las palabras que utilizan los falsos camareros para llamar la atención de los bañistas. El hostelero reprocha que la gente piensa que "es un servicio que es de la playa". "Están aquí entre nueve y diez horas al día", afirma el hombre. "Recargan la bandeja y siguen saliendo", le explica el hostelero a Jalis.

"¿Han calculado cuánto facturan los 'mojiteros' que dejan de facturar ustedes?", le pregunta Jalis de la Serna, a lo que el hombre responde: "nosotros calculamos al año más de 400.000 euros, en los seis meses de verano, desde Semana Santa hasta octubre". El hostelero termina diciendo que la policía tiene "muy pocas herramientas" y que si les pillan "a la media hora ya están aquí otra vez". Sobre si pertenecen a una organización o no, comenta que no lo sabe, "pero eso parece".

Tras conocer cómo se organizan los falsos camareros, Jalis de la Serna se dirige hacía la playa para hablar con algún 'mojitero'. "En ese coche azul se ha metido una persona con unas bolsas, que yo creo que llevaba el licor, y los hielos para preparar la bebida que luego venden en la playa", explica el periodista que se acerca poco a poco a donde está el chico para pillarlo 'en plena acción'. Después de un cruce de preguntas y respuestas, el falso camarero le cuenta a Jalis que lo que hacen "no es ilegal" y que tienen "un local para prepararlo". Sin embargo el reportero le cuenta que le ha visto preparar el cóctel en el coche, algo que niega el 'mojitero'.

Sobre si tienen o no licencia para vender, el joven asegura tener la licencia guardada en el coche pero a la hora de preguntarle si se lo puede enseñar, éste le dice que no. El primer mojitero no le da mucha información, pero el reportero consigue hablar con otro mojitero en la playa que le dice que "está solicitando la licencia" y que "antes la policía les decía algo, pero ahora ya nada".