La violencia que vivieron el pasado 25 de agosto de 2023 ha dejado sus secuelas y aún hoy, casi un año después, María del Monte e Inmaculada Casal siguen sufriéndolas. La cantante fue asaltada en esa fecha fatídica en su propia casa y, según apuntan todas las pruebas, por su propio sobrino, Antonio Tejado, a quien ella quiere como a un hijo. En la casa aquella noche, además del matrimonio, se encontraban la hija de Inmaculada con su pareja y una empleada doméstica.

Félix Ramajo, experto en seguridad, detallaba a Equipo de Investigación cómo fue el robo en el que Inmaculada fue golpeada, pero no María del Monte. "Es como si alguien diese una orden de que no se la tocase", aseguraba. "Casualidad que Inma está en el baño, entonces al salir se encuentra con dos encapuchados, y entonces se sorprende y grita: ¿Qué hacen aquí? Entonces María del Monte se da cuenta de que hay gente dentro de su casa e intenta esconderse debajo de la cama, pero no lo consigue". Uno de ellos creyó que la hija de Inmaculada conocía la contraseña de la caja fuerte. "Ella no la sabe y es golpeada brutalmente. A la vez Inmaculada es atada con un cable de teléfono, pero la presionan para que vean, sobre todo María del Monte, lo que está ocurriendo".

Tras casi 100 días en prisión, el pasado 20 de mayo Antonio Tejado salió en libertad provisional (junto a otros cinco encarcelados por los hechos) a la espera de la resolución del juicio en el que la María del Monte tuvo que declarar sabiendo que Tejado era el principal sospechoso de ser el autor intelectual del crimen. Así lo apunta un informe de la Guardia Civil en el que se estima que la llamada telefónica que Tejado a su tía para comprobar si estaban en Sevilla, con la excusa de la excusa de que quería regalarle un perro, es un indicio. En la actualidad, tiene prohibido ponerse en contacto con María e Inmaculada y no puede estar a menos de 500 metros de ellas.

Aún así, Inmaculada Casal desvelaba en el programa de televisión 'Andalucía de tarde' que tenía miedo después de que hubieran quedado en la calle algunos de los sospechosos. "Respeto la decisión judicial y sabía que iban a salir", decía. "Ellos saben quién soy, dónde vivo, cuál es mi familia, a qué hora salgo...", aseguraba aterrorizada. "Estas personas que entraron en mi casa iban con una capucha, no sé cómo son ni dónde viven".

El informe del forense realizado a las víctimas concluye que tanto María como Inmaculada sufren "lesiones psicológicas por las que al día de hoy se encuentran en tratamiento". Así lo confirmaba la cantante en 'El show de Bertín' en Canal Sur. Al violento robo que había sufrido hay que sumarle la pérdida de dos de sus hermanos y su madre, unas desgracias que sucedieron en un plazo de apenas año y medio y que han dejado a María completamente devastada.