"Las redes sociales se han cargado la forma de viajar", afirma tajantemente un guía turístico en este fragmento del pódcast 'La placita amarilla' del que se hace eco Aruser@s. Él lleva desde 2014 trabajando en el sector y ha observado la evolución del comportamiento de los turistas con auténtico pasmo.

Ahora, lo importante es la foto y ya no importa nada lo que el guía pueda decir del lugar que se visita. "Antes, la gente viajaba y obviamente, todo el mundo quería foto. Hasta nuestros padres hace 40 años querían la foto de un sitio. Pero es que ahora hemos tenido que cambiar muchísimo los itinerarios", denuncia. "A la gente la suda la p**** lo que diga el guía. Ya se ha separado del grupo para echarse la foto".

Lo que más se valora hoy en día, a su juicio, es subir la foto a Instagram al instante. Alfonso Arús sabe bien de lo que habla. "El otro día asistí precisamente a eso. En un semáforo me encontré con un grupo numeroso de turistas, frente a La Pedrera, con un guía al que no le hacía caso ni Paco. El guía hablaba solo", comenta el presentador. "Y me dio pena", añade.