Los cumpleaños de la infancia se suelen recordar por la ilusión que hace cumplir años en la niñez, y esta niña no olvidará este cumple gracias a una anécdota protagonizada por su perro. La pequeña se encuentra frente a la tarta mientras le cantan el cumpleaños feliz con las luces ya apagadas.

La joven cierra los ojos para pedir un deseo antes de soplar las velas. En ese momento, aparece su perro y se come la tarta de un bocado. La niña reacciona bien, ya que se ríe viendo la situación. Marc Redondo piensa que este vídeo es el mejor ejemplo de cuando te dicen "no puedes ni pestañear". Angie Cárdenas comenta bromeando que igual el deseo de la joven ha sido que el perro se comiese la tarta.