Una pareja española va a un Starbucksen Dubái y cuando piden su bebida, el camarero solo le pregunta el nombre a la chica porque piensa que el del chico ya lo sabe. "Hemos venido al Starbucks y aquí siempre te preguntan el nombre para ponerlo en el vaso", introduce la joven, que narra que ella le dice que se llama Elena.

En el café el dependiente le escribe 'Elenita, disfruta el día', mientras que a su novio, que se llama Sebas, no le pregunta el nombre y su pareja piensa que no le van a poner nada. "Y atención, le ponen Mohammed", cuenta entre risas la chica. Angie Cárdenas interpreta que será por el aspecto físico del joven.

Rocío Cano explica que ella, cuando va a una cafetería o restaurante en el extranjero, nunca dice su nombre porque no conciben fuera de España que su nombre acabado en 'o' sea femenino. Mientras que Alfonso Arúsopina que sería divertido que los camareros pusieran los nombres sin preguntar y en caso de que acierten hubiera premio.