Tamara Falcó ha acudido a la presentación de su última colección con Pedro del Hierro y allí ha hablado con los reporteros después de su boda con Íñigo Onieva y posterior luna de miel. La marquesa de Griñón ha confirmado que ha vuelto al tratamiento de maternidad porque dice que le "encantaría ser madre". Preguntada sobre su luna de miel, explica que ha nadado con tiburones, pero se negó a acompañar a Íñigo Onieva a hacer puenting.

Además, después de su ruptura antes de la boda por una infidelidad de Íñigo Onieva, los reporteros le preguntan si es una mujer controladora y si le tiene atado en corto, la diseñadora afirma rotunda: "Yo no creo que eso funcione, cada cual es responsable de sus actos". Unas palabras que no convencen a Alfonso Arús, que recuerda que después de la infidelidad Íñigo Onieva dejó de trabajar de noche.

Por otro lado, Tamara Falcó cuenta que se mudará junto a su marido a un piso a escasos minutos de casa de su madre en Puerta del Hierro: "Estamos en ello, pero faltan cositas. No es una gran casa, es un piso pequeño de 160 metros cuadrados y hay dos habitaciones".