Así reaccionó Rodrigo Barrio cuando se encontró en su poder el anillo que el asesino habría robado a su madre

Tras la reunión con Rodrigo, la Policía centra sus sospechas en el hijo mayor de Salvador Barrio y Julia dos Ramos. Y es que Rodrigo fue el único superviviente del asesinato de sus padres y su hermano pequeño, Álvaro, en su piso de Burgos en 2004. El motivo fue que esa noche dormía en el internado, a 80 kilómetros de Burgos. Entonces, ¿cómo habría podido cometer el crimen?

La respuesta la da el propio Rodrigo cuando apunta al jefe de estudios y a un compañero del colegio como posibles autores. "Cuando él señala a su mejor amigo como posible autor facilita una mecánica de fuga del colegio", explica Luis Muñoz, inspector jefe de Policía, que destaca que, de esta forma, el propio Rodrigo explicó como él mismo habría podido salir y entrar del internado sin ser visto para cometer el crimen.

"Rodrigo tendría que haberse escapado del internado, conducir durante una hora a Burgos, cometer los asesinatos sin ser visto y volver a la cama a la espera de que empezara la nueva actividad del día y, todo ello, sin dejar ni un solo rastro biológico", explica la periodista de sucesos Cruz Morcillo, que destaca que esto sería "un plan maestro cometido por un adolescente de solo 16 años".

El siguiente objetivo es el domicilio de Rodrigo, que, en ese momento, se sitúa en la casa de una tía materna en la localidad gallega de Queirugás. "Cuando nosotros hicimos una inspección en la casa de Queirugás, la sorpresa fue que en una pequeña caja de caudales aparece el anillo RB", explica la Policía, que detalla que ese anillo se trata del que desapareció del cuerpo de Julia el día de su asesinato. "Cuando aparece ese anillo, Rodrigo se queda con cara de sorpresa", recuerda el inspector, que cuenta cómo se vivió ese tenso momento. Sin embargo, el abogado de la familia paterna defiende a Rodrigo: "¿Quién ha dicho que esta señora en el momento en que se la asesinó llevaba ese anillo? Nadie".