En nuestras ciudades, por razones de seguridad y conforme a la ley, es imperativo que nuestros perros paseen atados a una correa la mayor parte del tiempo. Sin embargo, lograr que el paseo sea placentero, tanto para el perro como para su guía, incluso estando atados, es un proceso que requiere un poco de entrenamiento.
En este episodio, Ío Almagro destaca la importancia de permitir que los perros desarrollen sus conductas innatas, como el olfateo, durante el paseo y como esta actividad puede mejorar su vida y su felicidad. Además, aborda los problemas más comunes que enfrentamos al intentar controlar a nuestros compañeros peludos durante el paseo o al encontrarnos con otros perros.
Más Noticias
Un repartidor que estuvo al borde de la muerte y con más de 40 fracturas por un accidente laboral: "No he recibido ninguna llamada de la empresa ni de mi jefe"
La denuncia de un camarero que trabajaba 40 horas pero cotizaba 10: "Es una práctica usual"
Hosteleros denuncian que tienen 'simpas' varias veces por semana: "Somos una vergüenza de país"
Las lágrimas de Lydia Lozano por la muerte del periodista Carlos Ferrando: "Se va un amigo. Todo el mundo le quería"
200 personas y 5.050 euros a deber tras un bautizo: así se produjo el 'simpa' más multitudinario de España
Desde la elección adecuada y la colocación del arnés y la correa hasta el control efectivo de los mismos, Ío Almagro comparte las claves esenciales en este episodio de Como el Perro y el Gato. Lo hace siempre de manera respetuosa y divertida, contribuyendo a mejorar el vínculo con nuestro mejor amigo. Recuerda que, aunque la correa sea necesaria por seguridad, entender y respetar las necesidades naturales de tu perro puede hacer que el paseo sea una experiencia enriquecedora para ambos.