En la sesión en la que iba a nombrarse a Rafael Simancas presidente, desde el PSOE pedían un aplazamiento de la sesión porque faltaban dos diputados. Los dos diputados socialistas que faltaban eran Eduardo Tamayo y María José Sáez, que con su ausencia impidieron que su propio partido alcanzara la presidencia de la Asamblea de la Comunidad de Madrid: el evento se conoció como el tamayazo.

Ese mismo día por la tarde Eduardo Tamayo explicaba en una entrevista en Antena 3 que se trataba de una "toque de atención al compañero Rafael Simancas para que reconduzca sus acuerdo con Izquierda Unida".

El PSOE sospechaba que los dos diputados habían recibido dinero de una trama inmobiliaria y urbanística con el objetivo de beneficiar al PP. Tanto los populares como los trásfugas rechazaron tales acusaciones.