Han pasado meses, pero ni Jonan ni Ana olvidarán lo que ocurrió en el hospital de campaña de Ifema, en Madrid, donde se atendieron a pacientes con coronavirus en el peor momento de la pandemia. Él, ingresado grave en el hospital. Ella, una enfermera que creó una biblioteca improvisada para que los pacientes pudiesen llevar la enfermedad de una forma más ligera. El Intermedio ha hecho que ambos se reencontrasen para poderse agradecer el tiempo compartido.
"Estoy perfectamente recuperado gracias a los cuidados que recibí aquí. Me acuerdo de esos días y de la biblioteca que fue como ponerle ventanas a este sitio que no las tiene. Fue abrir una puerta a la esperanza y para que los enfermos pudiesen trasportarse de aquí", ha agradecido Jonan. Ana, que recuerda perfectamente el día que él llegó al hospital, ha recibido un libro dedicado del que fuera su paciente. "De circunstancias tan trágicas a veces se sacan cosas bonitas", afirma la enfermera para agradecer la amistad de su paciente.
Durante la entrevista, la sanitaria ha recordado el desmayo de una compañera en Ifema. "Fui a cogerla, pero me sujetaron porque no tenía EPI", cuenta, sobre aquel momento que recuerda con especial emoción.
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