Raúl Pérez y Cristina Gallego se ponen en la piel de Santiago Abascal, presidente de Vox, y Cuca Gamarra, secretaria general del Partido Popular. Ambos se enzarzan en una discusión sobre quién está dominando las protestas frente a la sede del PSOE en la calle Ferraz.

Para la popular, "la calle es del PP", mientras que, como es obvio, para el líder de ultraderecha "la calle es de Vox" y del Partido Popular, según Abascal, "son como mucho las terracitas". Abascal apoya su argumento en plantear una pregunta: "¿Quién estaba ahí, al pie de los gases lacrimógenos?", a lo que Gamarra le contesta: "Tú desde luego no, que hiciste como con la mili y te escaqueaste en cuanto se complicó la cosa".

Gamarra nombra al PP "guardianes de la unidad de España" y hace una analogía con el mundo del cómic diciendo que "el PP sería Batman mientras que Vox sería Robin". "Sobre todo tú, que te pirras por marcar muslito con unas mallas".

Para intentar calmar las aguas, ambos intentan llegar a un punto de encuentro e ir de la mano contra la amnistía. Para ello comparten un baile country contra Pedro Sánchez al que acusan de vender España a Puigdemont, le amenazan con ir a Ferraz a "montar un follón" e incluso piden la dimisión de Fernando Grande-Marlasca, con un ritmo muy pegadizo.