La vivienda en Ibizano solo es un problema para los trabajadores precarios y es que muchos trabajadores cualificados se ven obligados a abandonar la isla ante la imposibilidad de pagar un piso. Es el caso de Sonia Sancho, una joven que lleva trabajando muchos años en el Hospital de Ibiza. Con un buen sueldo y un trabajo estable, la auxiliar de Enfermería ha decidido abandonarlo todo.
"Los sueldos que tenemos son de 1.800 ó 2.000 euros, tengo un buen sueldo y estoy muy contenta, pero a la hora de buscar una vivienda los precios rondan los 1.800 euros para arriba y con mi sueldo no me lo puedo permitir", afirma la joven. "Tengo un hijo de 10 meses y ¿dónde voy con él?, ¿dónde vamos a vivir?, ¿en una caravana?, ¿en la calle?", reflexiona Sonia, que explica que, como tiene la plaza fija de enfermera tras sacarse la oposición ha decidido abandonar la isla.
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"Ahora mismo a mí la isla no me quiere", denuncia Sonia, que el 12 de septiembre marchará con su hijo a Ciudad Real, donde salieron varios traslados para su trabajo: "Allí hemos alquilado una casa con cuatro habitaciones y dos baños por 450 euros".
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