Ismail El Majdoubi es un joven marroquí de 24 años que se jugó la vida a los 16 años para llegar a la península. El motivo principal que le llevó a hacerlo es que siempre vivió al lado de una frontera, la de Ceuta, así como por las complicaciones económicas y la falta deexpectativas para terminar los estudios.
Superó la primera barrera, llegar a la ciudad autónoma, tras intentarlo día a día, pero cuenta que entonces se encontró con una frontera natural, el estrecho de Gibraltar. Logró cruzar escondido debajo de un camión: "Iba colgado".
Lo mejor de los centros de acogida, dice, es haber podido aprender español y "estar con gente que te cuida y te guía", pero expone que lo peor es la escasa "interacción con otros chavales españoles". Además, afirma que el término mena "se ha ido de las manos": "Ahora ya tiene una imagen, se ha convertido en un insulto".
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El fundador de la asociación Exmenas sostiene que "hay que cuidar los términos porque eso deshumaniza a esas personas, no nos ven iguales a los humanos". Así que insta a la Administración a comprometerse más con los derechos de la infancia. "Hay que tratarles no como invasores sino como a niños que necesitan ayuda, orientación y personas mayores que les acompañen", subraya.
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