El Partido Socialista de Cataluña se ha convertido en la fuerza política más votada en las últimas elecciones de Cataluña y Raúl Pérez se convierte en Salvador Illa, candidato socialista, para contar cómo ha celebrado su victoria. El 'candidato' llega al plató de El Intermedio bailando, algo por lo que segundo después se disculpa ya que considera que se ha "excedido".

'Illa' cuenta a Wyoming y Sandra que ha venido un poco perjudicado. "Ayer me volví loco, moje los labios en mosto. A mí eso se me sube a la cabeza que no veas...", explica. "También tengo mi lado canallita, después del mosto me subí a la barra y ahí sí que me volví loco: me quité las gafas", añade.

Wyoming le recuerda que le va a tocar pactar con varios partidos si quiere ser presidente. "Eso no me preocupa", contesta 'Salvador', "nadie se resiste a mis encantos, soy un seductor". El 'socialista' procede a mostrar qué hará cuando quede con Junqueras. De nuevo, vuelve a pedir disculpas por sus gestos. "A veces se me olvida lo poderoso que es mi 'sex appeal'".

El 'candidato socialista' también comenta qué opina de las amenazas de Puigdemont: "No me ha gustado nada, estoy que trino". A pesar de afirmar que está muy enfadado, su cara no cambia, pero procede a romper, ligeramente, el guion del programa. "Esta semana empiezo terapia, me estoy sobrepasando", añade.