'Un país en la riñonera'

Isma Juárez se introduce en el interior de un tonel de sidra: "Tiene más metros que mi piso en Madrid"

El reportero visita Nava, un municipio de Asturias para descubrir todos los secretos de la sidra. Isma visita una finca en la que elaboran esta bebida y, además, aprende, gracias a Antonio, un escanciador profesional, cómo escanciarla.

El reportero visita Nava, un municipio de Asturias para descubrir todos los secretos de la sidra. Isma visita una finca en la que elaboran esta bebida y, además, aprende, gracias a Antonio, un escanciador profesional, cómo escanciarla.

La sidra ha sido reconocida como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad según la Unesco, por ello Isma Juárez, en su sección 'Un país en la riñonera', ha viajado hasta Nava, un municipio de Asturias que, como afirma el reportero, "es prácticamente la capital de este brebaje".

El reportero se encuentra con Fran Ordóñez, enólogo de sidra de 'Viuda de Angelón', que le muestra las bodegas. Juárez descubre que una de los toneles, de gran tamaño, está abierto. Ordóñez le explica que, a través de ese hueco, se entra para lavar su interior. Isma no duda en meterse en el interior y lo consigue con bastante esfuerzo y la ayuda de Fran. "Se me ha pinzado el culo", se lamenta el reportero. "¿Qué tal ahí?", pregunta el enólogo. "Casi tiene más metros que mi piso en Madrid", responde, "es espectacular porque el eco hace que sea una muy buena cámara de sonido". El reportero ser anima, incluso, a cantar "por Melendi" y entona su canción, 'Asturias'.

Isma pasea después por el pueblo y charla con Antonio, uno de sus vecinos, que, además, es escanciador de sidra. El vecino explica que hay escanciadores de élite que participan en los concursos regionales y nacionales de escanciado. El reportero se anima a mostrar a Antonio cómo escancia sidra. El escanciador le explica que debe descorchar la botella más lentamente para evitar que se escape el gas y que el corcho se suele aguantar con dos dedos. "Antonio está viendo muchos problemas", afirma Juárez al ver todos los fallos que ha cometido.

Antonio le dice que no debe tener tensión para escanciar. "Lo has notado, ¿verdad?", responde Isma. El vecino le explica cómo debe coger la botella y le dice que, al escanciar, debe mirar el vaso. "Hiciste una parte buena", desvela Antonio, "moviste la botella en lugar del vaso. Normalmente, el novato intenta recoger la sidra con el vaso". El escanciador concluye su 'práctica' explicando que debe beberse la sidra "en el momento" ya que se oxida, pierde el carbónico, los sabores y los aromas.