Los últimos datos del IPC revelan que el precio del aceite de olivasubió un 67% el mes pasado respecto al mismo período del año anterior, es la mayor subida interanual de los últimos 21 años. Lucía Serrano, propietaria de una almazara, cuenta a Andrea Ropero que el kilo de aceituna se paga a 1,20 o 1,30 euros, pero aclara que para producir 15 litros de aceite se necesitan 100kg de oliva.
Esta apunta que los costes de producción se han multiplicado por dos, debido a la subida de la luz y al encarecimiento de la materia prima, y alerta de la caída en el consumo: "Se está poniendo como si fuese un producto de lujo y no lo es".
Serrano expone que han eliminado a los intermediarios para que al consumidor le llegue "un aceite de calidad y no se le eleve el precio" a importes que no se pueda permitir, algo que, según explica puede abaratar un litro un 30 o 40% con respecto a un lineal de un gourmet.
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Por este motivo, subraya que el cliente debe de apostar por comprar en origen, "se va a asegurar dos cosas: un buen producto y un menor coste, además, va a ayudar a esa empresa a seguir funcionando, porque alguno de nosotros nos estamos viendo en una tesitura complicada". "Apostar por el mediano o pequeño productor supone que nuestros jóvenes no se vayan, que se queden aquí trabajando, que siga funcionando el campo", sostiene.
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