'Está todo inventado'

De Trump a una María Antonieta "sencilla y campechana": Mikel Herrán recuerda otros retratos polémicos de la historia

Donald Trump no estaba contento con su retrato en el Capitolio de Colorado, y no es el único. Carlos II, Isabel de Inglaterra o María Antonieta ya protagonizaron sus propias polémicas, que Mikel Herrán recuerda en este vídeo.

Donald Trump no estaba contento con su retrato en el Capitolio de Colorado, y no es el único. Carlos II, Isabel de Inglaterra o María Antonieta ya protagonizaron sus propias polémicas, que Mikel Herrán recuerda en este vídeo.

Donald Trump ha conseguido que retiren su retrato del Capitolio estatal de Colorado después de las quejas del presidente. Sin embargo, este no es el único cuadro polémico de la historia.

Homenajeando a María Antonieta, Mikel Herrán habla en el vídeo sobre estas líneas del retrato de Carlos II y recuerda que, en estos casos, solían tener todo tipo de filtros.

Isabel I de Inglaterra, por su parte, estaba tan obsesionada con controlar su imagen que prohibió todos los retratos con errores y deformidades. Para cuando cumplió 50 años, obligó a los artistas a pintarla sin arrugas, lo que se llamaba la "máscara de juventud", una "imagen joven de la cara de la reina que pegaban en retratos nuevos".

En aquella época, señala, "los retratos reales eran una forma de propaganda muy útil para dar una imagen muy concreta del Gobierno y los reyes".

El retrato más polémico, de María Antonieta

El retrato más polémico fue, sin embargo, el de María Antonieta, que ante la imagen frívola y de derrochadora que se le atribuía, encargó una pintura que la sacara como una reina "sencilla y campechana".

Cuando el cuadro se desveló al público, se desató un enorme escándalo, pues la gente lo tildaba de "indecente, de falta de modestia", porque muchos pensaban que la reina había sido retratada en ropa interior. Mikel también se consideró que iba en contra de los valores de la monarquía, la tradición y su papel como mujer de la realeza.

El rey ordenó que se retirase el cuadro y se pintara otro. La artista decidió reciclarlo pintando encima otro vestido "con todo el pijerío versallesco" que, a pesar de mostrar más piel, "no les chocó nada". De hecho, este cuadro pasó a convertirse en su retrato más famoso.

Por todo ello, 'PutoMikel' entiende que Trump se haya enfadado por lo de su retrato: "Una mal selfie te puede joder la reputación, y eso Trump ya lo hace solito".