'Un país en la riñonera' lleva a Isma Juárez hasta Belorado, el pueblo donde se encuentra el convento de las monjas rebeldes que han provocado un cisma con la Iglesia. El objetivo del reportero de El Intermedio ha sido el de conseguir y probar las famosas trufas de Santa Clara, que preparan las clarisas.
Sin embargo, el revuelo mediático ha llevado a que en el pueblo sea muy difícil encontrarlas. En el vídeo sobre estas líneas, Isma lo intenta en una panadería, pero antes de entrar ya le dicen que no hay.
Finalmente, el reportero consigue el dulce más preciado de una de las vecinas que ha entrevistado, que le explica que ha conseguido una trufa auténtica "de una persona que la tenía en casa". Isma la prueba delante de ella y le da su veredicto: "Entre el Vaticano y las monjas de Belorado, yo ya he elegido", sentencia para luego hacerle una reverencia a la señora.