"Ahora cualquiera es periodista"
Wyoming advierte sobre que las redes sustituyan a los medios: "Todos podemos decir lo que nos dé la gana, inventarnos o mentir"
"La información ya no la elegirán unos señores sometidos a unas normas deontológicas y las leyes, sino unos algoritmos anónimos que no seleccionan lo más ajustado a la verdad, sino lo que dé más pasta", reflexiona Wyoming en este vídeo.
Wyoming arranca El Intermedio con un recuerdo para Valencia, a los que recomienda quedarse en casa estos días que volverá a producirse otra DANA. También recuerda otras catástrofes terribles, como la rotura del pantano de Tous en 1982, las inundaciones de Bilbao en 1983 o la riada del camping de Biescas en 1997.
Sin embargo, señala que existe una diferencia entre aquellas y las recientes inundaciones en Valencia, Castilla-La Mancha y Andalucía: "En ninguna de ellas se puso en duda el papel esencial de los servicios de emergencias, ni de las ONG, ni se agredió a las autoridades", asegura en el vídeo sobre estas líneas, donde señala que "los políticos de entonces no eran mejores que los de ahora".
Este cambio se debe, según Wyoming, al ruido de los "charlatanes, mentirosos y creadores de bulos" que "crecen como hongos" en las redes sociales. Ante esta cuestión, encuentra "preocupantes" las palabras de Elon Musk que, tras la victoria electoral de Trump, aseguró a sus seguidores que "ahora vosotros sois los medios".
"Para Musk se acabó la era de los medios regulados", comenta el presentador, que recuerda que se estos encuentran sometidos a "incomodidades legislativas" y tienen la obligación de "como mínimo, tener que aparentar veracidad".
"Ahora cualquiera es periodista", afirma Wyoming, que apunta que "todos podemos decir lo que nos dé la gana, inventarnos y fundamentalmente mentir". Sin embargo, concreta que se trata de decir "lo que le dé la gana a Musk, Zuckerberg, Jeff Bezos y quien sea el dueño de Tik Tok".
"La información ya no la elegirán unos señores más o menos preparados, sometidos a unas normas deontológicas y las leyes, sino unos algoritmos anónimos que no seleccionan lo más ajustado a los hechos y la verdad, sino lo que dé más pasta", sentencia.